La columna de Alexis López
Lo de los accidentes de transito que han venido ocurriendo con mucha más frecuencia en Carabobo, tal como lo comentó el gobernador Rafael Lacava, es una total locura. Agosto y septiembre han significado los puntos históricos más altos de este tipo de accidentes en el estado, lo que va en franca contrariedad con la situación en que se encuentran actualmente nuestras principales vías. La extraordinaria inversión que se ha venido haciendo en materia vial en Carabobo durante estos últimos años lo ha convertido en una referencia nacional y quienes vivimos acá sabemos que las principales autopistas de nuestro estado se encuentran totalmente alumbradas y asfaltadas de principio a fin, por lo que es claro existe un denominador común en estos hechos que va más allá de la situación de las autopistas que se hace necesario abordar de inmediato.
Existe un número considerable de conductas inapropiadas de conducción en nuestras autopistas y carreteras, siendo las más significativas las violaciones de los límites de velocidad, la ingesta de alcohol y la imprudencia, donde debemos incluir, por supuesto, el uso del celular mientras se conduce. Al entrar en el análisis de los principales componentes que se encuentran implicados enla mayoría de los accidentes de tránsito estos son el resultado de una causa particular: factor humano, el cual, de acuerdo a diferentes estudios que se han venido haciendo en Venezuela y el mundo, es reconocido como el más importante.
De manera que es absolutamente pertinente y necesaria la intervención del gobernador de Carabobo en este sentido, denunciando la irresponsabilidad de muchos conductores al manejar por las autopistas, en la propia ciudad y en las intersecciones, la imprudencia y la alta velocidad a todas horas, por lo que el anuncio de la instalación de una comisión técnica de alto nivel y la aplicación de severas sanciones a quienes incurran en situaciones irresponsables al manejar ha contado con todo el apoyo de la comunidad en general.
Con mucho beneplácito ha sido recibido por parte de diferentes sectores de la sociedad carabobeña el anuncio de la presentación de la propuesta de la nueva constitución del estado Carabobo, lo cual constituía una deuda que históricamente había sido postergada por los legisladores de turno desde el 15 de Diciembre del año 1999, fecha en que el pueblo venezolano aprobó la nueva constitución bolivariana presentada por el presidente Hugo Chávez Frías, la cual dio al traste con el instrumento jurídico madre de los gobiernos de la cuarta república que databa del año 1961. En el caso de Carabobo la constitución vigente fue aprobada el 19 de diciembre de 1990 y publicada en gaceta oficial del estado Carabobo extraordinaria el 7 de enero de 1991, perdiendo toda legitimidad luego de la entrada en vigencia de la nueva constitución bolivariana.
De acuerdo a lo que ha venido declarando a los medios y a través de las redes sociales el Legislador Alexander Suarez, presidente del Clec, en este nuevo instrumento jurídico se busca contemplar desde los derechos civiles hasta los derechos económicos de los carabobeños, lo que ha generado una muy positiva expectativa general que sin duda servirá para un amplio e interesante debate donde surgirán nuevas ideas y propuestas para enriquecer el contenido de la propuesta de nuestra nueva carta magna regional.
Luego de un candente debate dentro del cogollo del partido Primero Justicia (PJ) se decidió nombrar como máxima autoridad nacional de la organización a la ex diputada a la Asamblea Nacional por el estado Portuguesa María Beatriz Martínez, lo cual significó una jugada salomónica para tratar de ponerle fin a los enfrentamientos internos de Julio Borges, Juan Pablo Guanipa y Henrique Capriles Radonsky, quienes se han mantenido desde hace algún tiempo en una pelea de gallos por el control de las autoridades del partido. Julio Borges y su sector radical no le perdonan todavía a Capriles, ni se lo perdonarán jamás, el haberse sublevado y enfrentado en el 2020 a parte de la oposición que encabezaba Juan Guaidó y que estaba apoyada por él en ese momento, quienes se negaban rotundamente a acudir a las elecciones legislativas del 6 de diciembre de ese año. Capriles declaró en ese momento que el gobierno interino había muerto en abril de 2019 luego de la “payasada militar” del aeropuerto La Carlota.
En el caso de Julio Borges, quien también rompió relaciones con Guaidó en el 2021 luego de acusarlo de encabezar la corrupción de Monómeros junto a su entorno más cercano y haberle renunciado al “cargo” como “comisionado de relaciones exteriores” del “gobierno interino”, Capriles y su grupo lo señalan de ser parte de una elite privilegiada que por una parte desde la comodidad de “el exilio” llama a no participar en elecciones y por la otra disfruta de las mieles de los recursos venezolanos que se encuentran represados en el exterior y que están bajo la administración de Juan Guaidó y sus secuaces, mientras los camisas amarillas de a pie están todos los días en las calles venezolanas dando la cara junto a Capriles por la “libertad de Venezuela”.
Según algunos analistas, a pesar de la intensa puja interna, Capriles salió perdiendo de igual forma al quedar relegado únicamente como “Delegado” del partido mientras que el nuevo cogollo de los aurinegros lo integran Julio Borges, sobre quien pesa una orden de captura emitida por la Fiscalía General de la República y está inhabilitado por 30 años para ejercer cargos públicos por la Contraloría General de la República, quien es ahora el vicepresidente nacional de estrategia, comunicación y relaciones internacionales del partido; Tomás Guanipa vicepresidente de asuntos políticos; Edinson Ferrer, vicepresidente de organización; Paola Bautista, vicepresidente de formación y programas; y Juan Requesens, quien cumple condena de casa por cárcel luego de confesar su participación en un intento de asesinato contra el presidente Nicolás Maduro, ahora el nuevo vicepresidente de nuevas generaciones.
En el relleno de consolación, los cargos de los llamados “Delegados”, están Henrique Capriles Radonski, también inhabilitado políticamente para ejercer cargos públicos, Juan Pablo Guanipa, Carlos Ocaríz, Marialbert Amelia Belisario, Juan Carlos Caldera, Yajaira Castro, Elimar Díaz, Rafael Guzmán, Luis Lippa, Gustavo Marcano, Juan Miguel Matheus, Alfonso Marquina, Ángel Medina, Jorge Millán, Julio Moreno, José Manuel Olivares, Roberto Patiño, Pablo Pérez, Milagros Valera, Karim Vera y Alberto Galíndez.
Hasta aquí por ahora queridos amigos y amigas que me leen, les doy las gracias y un ¡Hasta la próxima! La Columna de Alexis López está disponible por ahora en www.ciudadposible.com.ve y en www.caraboboesnoticia.com. Cualquier cosa por aquí: aralopri@gmail.com